Empresas como Nike, Coca Cola, Siemens, Axe o Vodafone siguen apostando en sus campañas publicitarias en exterior por un soporte, la lona, capaz de comunicar e impactar. Lo hacen con conocimiento de causa y sin temor a innovar. La originalidad tiene recompensa: el éxito.
IMPRESIÓN DE LONAS. Estamos acostumbrados a verlas todos los días. Cuelgan de edificios, de centros comerciales y de tiendas. Incluso de escenarios y museos. Captan nuestra atención. Por su tamaño, por su diseño, por su creatividad. Son capaces, incluso, de hacernos olvidar aunque sea por un instante de nuestros problemas y sacarnos una sonrisa. O todo lo contrario, de hacernos enfadar, que queramos maldecir al conductor del autobús por haber arrancado antes de poder leer su eslogan, sus personajes. Hablamos de las lonas, un soporte que empresas de todo el mundo incorporan en sus acciones publicitarias y que, a pesar de llevar años conviviendo con nosotros, siguen siendo una poderosa arma de promoción de nuestros productos y servicios y, también, de marca.
Pero, aunque su poder es innegable y sus posibilidades son múltiples, no todas las compañías les saben sacar el provecho que merecen. No nos referimos, en ningún caso, a empresas como Nike, Coca Cola, Siemens, Vodafone o Axe. Estas entidades, como podréis comprobar en las fotos de lonas publicitarias que hoy compartimos con vosotros, le han dado una buena lección a aquellos que creen que en la era digital acciones como ésta no tienen sentido. También a aquellos que temen arriesgarse cuando de lonas o vallas publicitarias se trata. Como por su tamaño y su ubicación exterior ya es de por sí una garantía de éxito, prefieren no innovar en diseño y utilizar estos soportes como una herramienta informativa, dejando emociones a un lado.
Pero arriesgarse, ser original no es malo. Únicamente hay que hacerlo con conocimiento de causa, sabiendo exactamente qué es lo que quieres trasmitir como empresa y las características del entorno en que ubicarás tu lona publicitaria. Una vez hecho el estudio, es necesario ir un poco más allá. Darle una vuelta de tuerca a la campaña publicitaria para informar pero, sobre todo, para impactar y hacerlo construyendo imagen de marca positiva. Como hicieron los creativos de la campaña Inception: The Dream is Real (en nuestro país conocida Origen) que trasmitieron a la perfección la esencia de esta película y con sus lonas publicitarias consiguieron dejar con la boca abierta a los transeúntes y animar a los ciudadanos a verla en el cine. O la marca de pintura Coop’s Paint que diseñó su campaña publicitaria aprovechando al máximo las características del espacio en que iba a estar ubicada su lona publicitaria y convirtiendo a su gama de productos en la protagonista de esta acción.